El centro de la ciudad de Florida en la calle Independencia volvió a tener carnaval. Esta vez, el de niños, en una propuesta ágil, de calidad, que duró poco más de media hora y que se complementó con la realización de tres tablados frente a los principales cafés y restaurantes de la “Calle Real”. Tanto los grupos de Florida como los invitados destacaron por color, buena indumentaria, alegría y pequeñas vedettes que lucieron coloridas plumas y lentejuelas. Las murgas invitadas impusieron presencia pese a la edad, las comparsas destacaron por ritmo, y las escolas en alegría y buen sonido. Los niños ya se ganaron su espacio.
Los niños tuvieron su carnaval