OPINIÓN: Por Silvana Goñi Scitti

Muchos me han preguntado por mi ausencia en la Comisión Electoral Departamental de la Elección de Jóvenes del Partido Nacional y esperé que pasara el acto electoral para responder.

Obviamente experiencia, formación y mi trabajo de todos los días me hacían ser “numero puesto “para muchos, pero, esos muchos ignoran que no hay para mí más alegría que la de militante liso y bien en el llano, el compartir una jornada electoral con los compañeros de siempre y el enseñar el ejercicio del voto a los nuevos es para mí en este momento más satisfactorio que integrar una comisión, que, reconozco, para la próxima y varios casos ya pide el merecido relevo generacional del que en esta instancia me salvé (yo y unos cuantos/tas).

Mis felicitaciones a mi jefe eterno y lleno de experiencia en estas lides, Don Eduardo Gassire, al laborioso Juan Gandini que no dio la ida por la venida, a la criteriosa Amalia Ramos y al siempre dispuesto amigo Guillermo Montaño, al Presidente de la Comisión Departamental Nacionalista Charlie Pérez D´Auria por un trabajo pocas veces recompensado como es debido con el agradecimiento de todos nosotros porque es una misión organizativa que me consta compleja y difícil, en efecto, mover la modorra de los dirigentes y militantes a tanta distancia de las Elecciones de 2014 no es changa como no lo es muchas veces la falta de fondos.

Encontrar lugares adecuados y disponibles para instalar los circuitos en puntos estratégicos de cada localidad que conformarán el plan circuital, gente dispuesta a integrar mesa en un día de descanso y por varias horas por amor al Partido, el traslado de las urnas de ida y de vuelta y la solución de un sinfín de problemas de funcionamiento en todo el Departamento, sin contar el momento de la presentación y corrección de las listas son en resumen tareas que se deben desempeñar con responsabilidad y agilidad, pruebas que estos compañeros supieron sortear excelentemente. Para el futuro como experiencia quedan algunos detalles a perfeccionar.

La bandera flameando por el helado viento que soplaba, desbordados por la concurrencia (en general toda a último minuto), comiendo parados y a las apuradas, con un frío que se hizo sentir, la luz que escaseaba de a ratos por la cantidad de chicos yendo y viniendo alrededor de la mesa, esas cosas hacen inolvidables estas ocasiones que no las cambio por nada.

A los muchachos que participaron votando e integrando listas el mensaje es continuar adelante y ocupar a conciencia los puestos de lucha que el Partido Nacional les da, no se queden en este acto, propongan, participen, hagan sentir el peso de su presencia, empujen con ideas nuevas, rebélense, opinen, digan lo que les gusta y lo que no, no acepten sumisos el “porque siempre se hizo así” y nunca jamás permitan que nadie les quite la alegría, porque política se hace con compromiso pero también con alegría, sólo de esa manera todo este trabajo de tantos valdrá la pena…