covisapuf
Foto: Esteban Aranda, vía Facebook

Covisapuf, con gran y prolijo esfuerzo propio, y crédito ministerial de Vivienda, concretó en 23 meses, el sueño de la casa propia.

La cooperativa “es modelo” para otras por su trabajo “rápido”, ya que si bien iniciaron las acciones en 2005, cuando arrancó la construcción de 26 viviendas, se logró en poco menos de dos años.

La cooperativa tuvo su inicio entre funcionarios de la Comisión Interna del Hospital. Poco después, otras familias se sumaron y el objetivo ampliado, superó la expectativas en tareas.

“Mucho esfuerzo tiene su fruto. Lluvia, frío, calor, sacrificio, invierno, primavera, otoño, verano, beneficios, trabajo mucho trabajo. Y bueno, salió la casa. Contentos, super contentos”, describió Esteban Aranda en su perfil de la red social.

Dos, tres y cuatro dormitorios, conforman la unidades con techo de loza, aislamiento paredes y otras bondades constructivas.

Calles, muros de contención, muros divisorios y otros detalles son tarea para los propietarios que, además, tienen la posibilidad de ampliar a un dormitorio con cimientos ya concretados.

“Estamos muy felices. Hemos trabajado mucho para edificar la casa en 23 meses. La unión del grupo fue muy importante”, dijo Virginia De Lima, vocera de la cooperativa.

El arquitecto Juan Cáceres, representante del Instituto de Asistencia Técnica recordó un viejo lema: “Si se quiere, se puede. Ahora, además de todo, van a enriquecer su patrimonio a futuro pagando por algo propio”.

Cáceres definió la obra como “de buenos rendimientos”, teniendo en cuenta que los propietarios se hacen cargo de un 15% de los aportes.

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Las unidades reajustables que vale cada vivienda