Una mujer de 72 años fue condenada a 22 meses de prisión —que cumplirá en régimen de libertad a prueba— tras un incidente con arma de fuego ocurrido en una vivienda de la ciudad de Florida. La justicia no la condenó por la muerte del can, sino por delitos de violencia privada, daño y acometimiento con arma apropiada.
El hecho ocurrió el pasado 8 de octubre, cuando la Policía concurrió a una casa ubicada en calle Joaquín Suárez de la capital departamental, tras un aviso por disparos de arma de fuego.
En el lugar, los efectivos tomaron conocimiento de que una mujer de 72 años había efectuado disparos con un revólver calibre 22, provocando la muerte del perro propiedad de su sobrino y su pareja.
Personal de Policía Científica realizó el relevamiento en la escena, incautando el arma, tres vainas y cuatro cartuchos. La mujer fue posteriormente indagada y admitió haber realizado los disparos.
Sin embargo, al elevarse el caso a la justicia, la Fiscalía Departamental de 2º Turno y la Defensa Pública alcanzaron un acuerdo abreviado, mediante el cual la justicia dictó condena no por la muerte del animal, sino por otros delitos vinculados a la conducta violenta de la imputada.
La sentencia del Juzgado Letrado de Florida de 1° Turno estableció que NMBV es autora penalmente responsable de:
un delito de violencia privada, en concurrencia formal con un delito de daño, y un delito de acometimiento con arma apropiada, en régimen de reiteración real.
Fue condenada a 22 meses de prisión, que cumplirá en libertad a prueba bajo condiciones de control, entre ellas residencia fija, arresto domiciliario nocturno, presentación semanal en seccional policial, servicios comunitarios durante un mes y prohibición de acercamiento a las víctimas —su sobrino y su pareja— en un radio de 500 metros.
La justicia consideró como atenuantes la confesión de la mujer y su primariedad, dado que no poseía antecedentes penales.
En la resolución, el magistrado aclaró que la calificación penal no incluye el delito de maltrato animal, sino que se circunscribe a los ilícitos mencionados, en el marco de un conflicto familiar que derivó en un uso indebido de arma de fuego.