Por Alexis Trucido

En la primera línea del salón Azul del Centro Social 12 de Octubre de Sarandí Grande (40 kilómetros al norte de la capital departamental de Florida) había decenas de periodistas, entre ellos quien escribe, junto al colega de Canal 10, Martín Lees y el funcionario de la comuna, Wilson Monti. Los cito a modo de ejemplo, entre muchos más, pero principalmente por el pequeño dialogado entre ellos.

En ese instante comentaron algo evidente: «están hablando y se escucha todo». Pero, el audio que salía por el altavoz estaba en realidad rodeado por un enorme murmullo de espera previa a que el mandatario hablara, mientras se firmaban una serie de documentos. No era claro y nadie lo notó.

Según un funcionario que solicitó el anonimato, Mujica fue avisado entonces por Enciso de la posible apertura de los micrófonos, a lo que el primer mandatario le respondió al intendente de Florida: «¿qué le hace una mancha más al tigre?».

La conversación -«sobre Lula, la mano que éste le había dado con Dilma y las relaciones con Cristina, según se confió»- continuó, y hubo más de una sonrisa del primer mandatario, que siguió conversando mientras que los periodistas no notaban más que un simple murmullo.

En ese momento, ante lo que supuse una conversación amena, decidí tomar una serie de fotografías (ver abajo) y las guardé.

Tras finalizar el acto, y luego del almuerzo, Mujica le dijo a Enciso que hiciera de cuenta que no había escuchado nada. «Agarrá y decí que no escuchaste nada», fue la frase exacta que Mujica el dijo a Enciso, según contó a FloridAdiariO el periodista Emilio Martínez Muracciolle que lo escuchó en el lugar.

Pero la mancha del tigre se conoció, cuando alguien le avisó a Enciso “que estaban las declaraciones de Mujica en internet”.

Rápidamente, una funcionaria que no pudimos identificar, comenzó a consultar a los periodistas sobre “los dichos de Mujica y si alguien tenía el audio de las mismas”.

Los colegas comenzaron a preguntarse “qué había dicho” Mujica y la publicación de El Observador, ya vía Twitter, corría como regero de pólvora, mientras que había comentarios que incluso confirmaban algunos dichos posteriores entre Enciso y Mujica tras la ahora polémica conversación.

El responsable del audio de la empresa que se encargó de la amplificación, indicó a FloridAdiariO que el enlace que tenía era directo hacia Presidencia y no notó la conversación.

Nosotros enlazamos directo porque Presidencia solicitó que se dejara abierto para las pruebas de sonido. Sinceramente no escuchamos nada”, contó tras los dichos.

Por su parte, el responsable del canal A+V, Martín Olaverry, indicó que «se cerró» el micrófono en ese momento, aunque otro integrante del canal, prefirió no confirmar esa afirmación.

Tras conocerse la noticia, la empresa de audio recibió llamados desde la dirigencia del MPP, para establecer “cómo había salido el audio”.

Posteriormente, cuando Mujica fue a comer al Club Deportivo Social Sarandí Grande, a una cuadra y media del otro club, fue llevado en auto, y la guardia privada ordenó que no ingresarán periodistas al lugar para, seguramente, evitar preguntas. Mujica comió con tranquilidad, pero ningún periodista ingresó a realizar las posibles preguntas, ahora y posiblemente todas, sobre lo que ya era vox populi.

Luego, sin hacer comentarios, se fue. Y lo demás, ya es historia.