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El camión enterrado en el momento en que se trabajaba en el lugar. Foto: Gentileza Ing. G. López.

“Es muy frustrante que pese al esfuerzo, la lluvia y el alto pasaje de camiones nos destroce lo que hemos arreglado. Ya hemos atendido varias situaciones de emergencia y seguiremos trabajando”, dijo a FloridAdiariO el Ing. Guillermo López.  

Más de 100 milímetros en Polanco del Yí

Las rutas 58 y 57, entre otros caminos vecinales, pasos y calles, sufrieron serios daños en las últimas horas en Florida, producto de las constantes e incesantes precipitaciones registradas en medio de un llamado de atención amarillo que sigue anunciando inestabilidad.

Si bien no hubo que lamentar daños materiales aún ni en personas físicas de entidad, la comuna y una empresa privada tuvieron que lidiar con el enterramiento de un camión de transporte lechero, que debido al barro en uno de los caminos, terminó por atascar su marcha.

El Ing. Guillermo López, responsable del área de Planificación de la comuna, dijo a FloridAdiariO que se han atendido varios casos de emergencia para asegurar la transitabilidad, pero que la tarea ha sido compleja. “Hay mucho barro y mucho tránsito que, junto a la lluvia, complica mucho. De todas maneras atendemos la situación y esperamos por la mejora del clima”, afirmó.

Pero los registros de lluvias en las zonas donde ya se han producido roturas no son alentadores. Por ejemplo, en Polanco del Yí, se registraron 128 milímetros en las últimas 48 horas. También cayeron 70 milímetros en Mansavillagra, 90 en Nico Pérez y 80 en Capilla del Sauce.

Si bien también se registraron lluvias importantes en el sur del departamento, López indicó que “esa zona aguantó bien, a excepción de un camino, pero en el resto se aseguró la salida de la producción. Sabemos que el mal clima sigue y las lluvias seguirán, pero igual estaremos atentos a todas las emergencias posibles”.

FLORIDA. Varias calles anegadas durantes minutos, y bocas de tormentas saturadas, fue el panorama en Florida en medio de las lluvias. El pequeño pluvial junto al estadio Campeones Olímpicos, que había sufrido una rotura en lluvias pasadas, fue reparado y respondió bien ante la intensas precipitaciones.