101B9510El edil que acusó a Riva de cometer “actos de corrupción brutal” dijo a FloridAdiariO que la observación del Tribunal de Cuentas le “da la razón en general” pero considera que debe actuar la Junta Anticorrupción. Sostiene además que está en juego la ética de los gobernantes de Florida.

Nota relacionada: «Martínez: yo no presiono a la justicia»

El pasado 16 de agosto en una entrevista con el periodista Fabricio Álvarez de Canal 3 (Florida Satelital) Martínez Latorraca se refirió hacia Riva como “una persona corrupta, una persona que comete el delito de concusión” que además “comete actos de corrupción brutal y grandísimos actos de corrupción” por entender que “publica y cobra avisos que genera” desde la comuna.

El jerarca de la comuna lo denunció penalmente por difamación e injurias. Allí, apeló además a la “excepción de verdad”, es decir, a demandar a Martínez y exigir la prueba de la verdad.

Tras la concreción de la tercera audiencia la resolución fue rápida. No se tuvieron en cuenta los anexos de las pruebas y la fiscalía se basó en el testimonio de Martínez, archivando el caso.

Ahora, al conocerse la observación del Tribunal de Cuentas, Martínez dijo a FloridAdiariO que al menos en general, tenía razón y que le da tranquilidad que la situación, supuso que la Junta profundizara en el tema.

“Esta observación me encuentra con la máxima calma porque mi situación de alguna manera llevó a que la bancada de ediles profundizara en este tema e hiciera el pedido ante el tribunal”, dijo el curul.

Para Martínez, esta sólo es una parte del problema porque “jurídicamente siempre hay posturas que no coinciden con la ética”.

“El problema principal cuanto planteé los dichos es que apunté a la parte ética del periodista y el gobernante, y por eso creo que esto no es suficiente. Esto tiene que tener intervención de la Junta Nacional Anticorrupción para determinar la ética de los gobernantes”.

El pedido de actuación de la Junta de Transprencia y Ética Pública (JUTEP) de Martínez es en el marco de que “hay una responsabilidad ética”.

Y es que según Martínez “esto está ajustado a derecho, y capaz que sí, que tiene que estarlo porque en algunos casos hay carencias de elementos. Pero lo que debe estar claro, es que la persona que ocupe un cargo público, éticamente tiene que ser responsable de las consecuencias de sus actos”.

“Nadie puede ser dueño de un instrumento o un medio que le vende servicios al lugar donde él es uno de los responsables”.

Carlos Martínez en declaraciones a FloridAdiariO.

“ES TERRIBLE”. Martínez definió que la situación concreta que hoy analiza el TCR “es terrible”. “Es terrible, es horrible, yo no se como calificarlo porque de pronto termino con otro problema que no me interesa ni me gusta -aunque si tengo afrontarlo lo haré- pero desde todo punto de vista es espantoso”, sostuvo.

“Que una persona esté en el gobierno y a la vez en una empresa privada que tiene vínculo director con el gobierno es flagrante implicancia”, remarcó.

Martínez consideró que “se trata de un medio de importante tradición que, además, ha redoblado la apuesta donde no solamente el director publica y cobra por lo que pública”.

Si bien entiende que “ahora algunas campanas son de palo y es muy difícil hacer escuchar la voz de algunos”, dijo que le preocupa “la salud ética y moral de los gobiernos floridenses” porque “acá nos estamos jugando el presente pero también el futuro”.

Y esto, explicó, se debe la liviandad de los tratamientos de los temas. “Si dejamos que todo vale, nada importa, que todo está bien, o todo está mal, estamos hipotecando las mejores tradiciones de los floridenses”, reflexionó.

“Yo soy responsables como ciudadano y quiero que en mi departamento haya una forma donde se respeten determinadas condicionantes para conducirlo”, agregó.

En cuanto a si la observación del Tribunal de Cuentas le da la razón sobre los dichos que lo llevaron a juicio, Martínez afirmó: “de modo general si. Yo tenía razón, pero independientemente de eso, igual tengo razón porque mi planteo era claro, y el que no lo quisiera entender es justamente porque no lo quiere.

Hay muchos más de los que uno cree que lo entendieron y es el deseo de la población de Florida y de él país que algunas cosas no ocurran más. Hay cosas que no se toleran más”.