El hombre, de 45 años, no trabajaba desde hace años y aprovechó la situación de la madre que le dio para vivir y terminó usurpándola, por lo cual también fue denunciado por sus hermanos, que esperan ahora una medida cautelar por parte de la Justicia. El ladrón quedó libre por falta de pruebas y volvió a la casa de su progenitora, que temporalmente se fue de la vivienda.

El perfil de quien habría robado la financiera es mucho más complejo y generó, lamentablemente, un gran malestar familiar por su despreciable actitud hacia su madre y familiares que ya habían decidido denunciar el caso ante la Justicia ante una serie de acciones que se venían sucediendo.

H.D.T., ludópata sí, pero también alguien que ejerció antes violencia física contra su ex pareja, y ahora violencia patrimonial y económica contra su madre por lo cual fue denunciado, completó el fin de semana uno de los más deleznables actos contra quien decidió darle ayuda y cobijo en más de una oportunidad, aunque terminó destruyendo prácticamente todo lo que tenía a su alcance.

De lo que se presume, pero niega, concurrió a la financiera en cuestión y amenazó solicitando una suma mayor a los 50.000 pesos, con la cual huyó del lugar muy tranquilamente.

Las autoridades encontraron el dinero en la casa de su madre. El implicado lo había escondido en una caja. Aún así, las autoridades no pueden terminar de vincularlo plenamente, ya que no fue encontrada la ropa con la cual quedó registrado en las inmediaciones, y llevó a una confusión inicial por la cual se detuvo a otra persona.

El hombre no solo se cambió de ropa al salir de la casa, sino también después del robo, por lo cual ese detalle es fundamental. Tristemente, por esta razón, está en libertad a la espera de los avances de la investigación. Pero hay más.

NI TRABAJADOR, NI RECONOCIDO, NI BUENO

Ni reconocido ni trabajador, el hombre hace varios años que no trabaja más que de changas ocasionales de algún oficio, hechos con los cuales también afectó a propios y ajenos, con diferentes maniobras para obtener dinero.

Aún más, tampoco tiene domicilio fijo. Y figura en situación de calle, razón por la cual, terminó usurpando el inmueble donde habita su madre, a la cual forzó incluso la puerta para ingresar y afincarse allí, iniciando una serie de engaños y estratagemas para controlar los ingresos, el no pago contumaz de las obligaciones y menoscabar la autonomía de la mujer.
Peor aún, la denuncia ahora realizada por madre y hermanos, implica la violencia patrimonial porque dispuso del magro patrimonio de una jubilada, mediante la sustracción de cuentas, distracción, daño, limitación y retención de objetos, documentos personales, bienes, valores y derechos patrimoniales.

El hombre, por ejemplo, hizo varios retiros bancarios por abultadas sumas mediante engaño, engrupió a familiares y amigos, sacó créditos a nombre de la mujer, y terminó yendo a la financiera estrictamente para su propio beneficio, ya que si bien sostuvo que pagó deudas, esas no estaban vinculadas con sus desviadas intenciones.

INVESTIGACIÓN Y DENUNCIA

Tras el desafortunado imprevisto en que la Policía detuvo a un trabajador “tomaconsumos” por tener similares ropas y características a quien ahora se involucra, la investigación prosigue en tratar de encontrar más elementos para someterlo ante la Justicia.

Pero no es lo único.

La familia de la mujer también amplió la denuncia al descubrir nuevas y eventuales maniobras en registros y estados de cuenta, a los cuales se pudo acceder recién después de la detención. Es que además, se descubrió que el hombre manejaba el teléfono celular de la damnificada, generando mensajes falsos acerca de su estado de salud y bienestar general, que se iban descubriendo poco a poco.

Ahora, serán las autoridades judiciales que determinarán las próximas derivaciones de quien se espera, al menos, reciba algún tipo de condena por el daño causado hasta el momento.