El caso ocurrió cuando la víctima, una menor de 16 años junto a otras personas, estaban en una reunión cuando comenzaron a compartir bebidas en horas de la noche en una casa de un barrio de la capital departamental.
En determinado momento, la joven se sintió con mareos y pidió para recostarse. La siguiente situación que recuerda es que en la habitación donde se acostó el ahora imputado ingresó y la obligó a mantener relaciones, abusando de ella.
Tras la detección del caso y la posterior denuncia, el hecho fue derivado rápidamente a la Unidad de Violencia que junto a Fiscalía iniciaron las actuaciones correspondientes.
Finalmente, después de la investigación, el hombre de 33 años, identificado C.S.V.C., fue condenado por un delito de abuso sexual especialmente agravado, específicamente por la edad de la víctima.
La pena establecida es de tres años y ocho meses de penitenciaria de cumplimiento efectivo.