Las activistas LGBTQI+, Tania Patrón y Paola Larrosa, revindicaron los derechos conquistados pero afirmaron que aún falta trayecto por recorrer.
“Salimos a gritar sin ley en 2013. Y acá seguimos. En un contexto de pandemia que llevó a que la población LGTBQI+ más vulnerada, pobre y sin formación, a una situación extrema que sufre bulling, debe pararse en una esquina para trabajar, y es la población que más afectada en la comunidad”, comenzó señalando Patrón luego que un importante marcha recorriera las calles de la capital floridense y culminará con acto y espectáculo en la plaza Asamblea.
“A pesar de los problemas celebramos y lo hacemos con la alegría y esperanza de que nuestra colectividad se fortalezca y encuentre mayor comprensión en la sociedad”, agregó.
ASESINATOS
Patrón recordó que recién hace 29 años la Organización Mundial de la Salud eliminó la homosexualidad como “enfermedad mental” de la lista.
“Desde ese tiempo es mucho lo que hemos logrado, teniendo en cuenta que fuimos pecadores, luego criminales y después enfermos mentales. Por eso tenemos que festejar los avances en el mundo occidental y por el trabajo de colectivos como el nuestro”.
En tal sentido, dijo que la reivindicación en un acto público es importante “porque aún hoy no es posible en diferentes partes del mundo”. Aún así, y aunque los avances en leyes y desarrollo desde el estado son importantes, la activista remarcó que “también es insuficiente”.
Por ello, llamó al compromiso para tener mayor fortaleza “a la hora de ser escuchados”. Además, lamentó que tras nuevos estudios sobre la población trans en Uruguay, se conozcan resultados adversos.
“Se mantienen los problemas laborales, discriminación, violencia física y abusos de poder”.
“Sí a la fiesta y la alegría, pero sin olvidarnos que hace poco, un asesino confesó la muerte de seis compañeras trans, seis. Sin que hubiese alarma… ni en la Policía, ni en los titulares de los medios de prensa ni tema para nuestra clase política. Y salvo para nosotros, al resto no le movió un pelo”.
INCLUSIÓN Y EDUCACIÓN
“En los últimos años la diversidad ha llamado la atención incluso a las empresas, que hasta hecho publicidad con nuestra bandera pero minga que van a tener políticas de inclusión laboral”, dijo por su parte Larrosa al remarcar situación de discriminación en la sociedad.
“Esto se agrava cuando son trans, que muchos siguen viendo como prostitutas pero no como para trabajar siquiera como repartidor, y menos conducir un taxi o realizar la venta de algún mayorista”.
Larrosa dijo que aún más ocurre con “las lesbianas o bisexuales, que ni siquiera somos visualizadas”. “Quienes no han escuchado alguna historia de mujeres mayores que vivieron juntas toda su vida y les dicen que son amigas; no gente, son pareja”.
Además, dijo que la educación es la clave para aceptar lo que debe hacerse con naturalidad. “Hay que educar, educar y educar para llegar a todas las orientaciones sexuales y que las identidades sean manejadas por la sociedad de forma más natural”.
Ello, dijo además, facilitará que las adolescencias gays, transexuales, lesbianas, transiten por el ciclo educativo sin la discriminación que ocurre en diferentes centros y que muchas veces termina con el abandono de ese adolescente. “Eso nos puede ayudar en una mejor posibilidad laboral y lograr una mejor convivencia”.
“¡A trabajar, hay que hacer de la colectividad de Florida un espacio fuerte para ayudarnos entre todos!”, concluyó.